Básicamente, una carretilla elevadora sirve para transportar y elevar cargas.

Muchas veces no somos conscientes de lo duro que resulta descargar un camión a mano. Alguno de nuestros clientes lo han hecho hasta hace bien poco. Consideraban que no iban a rentabilizar la compra de una carretilla elevadora. Cuando finalmente han dado el paso, han terminado dándose cabezazos contra la pared por no haberlo hecho mucho antes. Lo que hasta poco tiempo antes consideraron poco menos que un artículo de lujo, ha terminado siendo útil para muchos otros cometidos: cambiar focos en el techo, pintar la pared de la nave, sacar la basura, y un largo etcétera.

Pasan los años y las carretillas elevadoras siguen siendo un elemento clave para la actividad de una empresa, sea cual sea el sector. Y es que el elemento "tiempo" sigue siendo uno de los bienes más preciados para cualquier negocio. Y si algo nos regala una carretilla elevadora es eso: tiempo por encima de todo.

En la actualidad, se ha mejorado notablemente la tecnología, lo que permite una productividad muy superior a la conseguida apenas unos años atrás y se ha dado la importancia que se merece a la ergonomía, pasando a convertirse la conducción de una carretilla elevadora en una labor sencilla y agradable. Lejos quedan las humaredas, incómodos ruidos , direcciones duras...

Así que si piensa montar una empresa que precise un mínimo stockaje, déle preeminencia a la adquisición de una carretilla elevadora.

Pero sobre todo... escoja la apropiada, nosotros le ayudamos