COMERCIO ONLINE Y TRANSPORTE: ¿EL LADO BUENO DE LA PANDEMIA?

Por Recamasa 25.02.2021

Después de la tormenta, llega la calma. O eso dicen. Pese a que son muchas las lágrimas derramadas por una pandemia cuyo fin aún es difícil de pronosticar, también son demasiadas las voces que aseguran que al sector logístico no le ha venido del todo mal. Al menos no para sus cifras.Después de la tormenta, llega la calma. O eso dicen. Pese a que son muchas las lágrimas derramadas por una pandemia cuyo fin aún es difícil de pronosticar, también son demasiadas las voces que aseguran que al sector logístico no le ha venido del todo mal. Al menos no para sus cifras.

 

Mientras que muchos sectores, la mayoría, aún sufren las consecuencias de una crisis sanitaria sin precedentes y ven sus negocios cerrados, otros, aunque menos, han visto sus compañías crecer. Mientras que muchos sectores, la mayoría, aún sufren las consecuencias de una crisis sanitaria sin precedentes y ven sus negocios cerrados, otros, aunque menos, han visto sus compañías crecer.

Parece una paradoja, pero así es. Y la respuesta es clara. Mientras la crisis de la Covid-19 cerraba las puertas a millones de establecimientos, los consumidores se vieron obligados a cambiar sus formas de comprar y también de entretenerse, superando así el miedo a lo desconocido. De hecho, sólo en las primeras semanas de la pandemia, entre un 1 y un 4 % de los ciudadanos españoles compraron por internet por primera vez y casi una cuarta parte de la población aumentó sus adquisiciones digitales.

Pero, además, las largas estancias en casa nos hacen a menudo aumentar nuestro deseo de compra. Prueba de ello es que, según un estudio Coronavirus e-commerce: Cómo ha afectado el coronavirus en el comercio electrónico en España los españoles solíamos comprar dos veces de media al mes para un total de cinco artículos, un dato nada alejado de la media europea. Sin embargo, tras el desembarco del virus en nuestro país, la cifra ha ascendido, nada menos, que de 5 a 8 productos en el mismo periodo. Y es que nunca hemos comprado más, teniendo, seguramente, menos de la mitad de las necesidades.

Temores en conflicto

Así las cosas, la pandemia ha obligado o, igual es más correcto decir que ha facilitado al comercio online el camino hacia una maduración exprés, para el bien de muchos sectores, pero también de muchas compañías logísticas. Y este ha sido el motivo por el que el temor por salir a la calle de muchos ha superado su miedo a los pagos por internet. No en vano, la última encuesta del CIS asegura que el 23% de los ciudadanos ha aumentado las compras online durante la pandemia y que el 1% lo ha hecho por primera vez.

Pero no sólo los consumidores hemos cambiado nuestros hábitos de compra, también los negocios han tenido que adaptarse. Y es por eso por lo que multitud de Pymes se han lanzado a la aventura de vender en la web.

En este sentido, la asociación de publicidad y marketing digital ha hecho público un reciente estudio en el que revela que España cuenta con 22,5 millones de compradores online, pero además un 23% de los encuestados compra sólo online.

Parece claro que esta crisis sanitaria no estaba en el imaginario de nadie, pero tampoco lo estaba la forma en cómo nos ha cambiado. Y aunque parece que, como en todas las guerras, siempre hubo ganadores y vencidos, en este caso, ni el aumento de las cifras, en algunos casos exponencial, le ha llevado a nadie a defender que la multiplicación de su beneficio haya merecido la pena.